Como fabricante de telas sostenible, Supreme se compromete no solo a crear bellas telas para nuestros clientes, sino también a tener un impacto positivo. La planta de tratamiento de aguas residuales de nuestra fábrica de Pondicherry nos ayuda a tener este impacto positivo. Al convertir las aguas residuales en agua que puede usarse para ayudar a que crezcan los árboles que rodean nuestra fábrica, tenemos un impacto duradero y defendemos la sostenibilidad ambiental del sector textil.